Idear nuevos proyectos, cerrar tratos comerciales, organizar las tareas del equipo, planificar la comunicación, gestionar trámites administrativos y facturar son algunas de las acciones que hacen de nuestro día a día laboral una rutina. Y ésta se convierte en un ciclo que va desgastando a la empresa y a sus trabajadores.
El mundo se encuentra en un proceso de cambio, que cada vez va más rápido gracias a las nuevas tecnologías, eso nadie lo niega. Sin embargo, más de uno se muestra reticente a la hora de adaptar su modelo de gestión empresarial.
Tres de las debilidades más frecuentes entre las PYMES son:
1. Una cultura empresarial olvidada, diluida o inexistente. Sin una identidad propia, sin un conocimiento de cuál es la razón de ser de esa corporación y de qué la diferencia del resto, es muy difícil determinar el rumbo que debe seguir con cada proyecto y la mejor forma de hacerlo según la época.
2. Falta de estrategia. Cuando nacen, la mayoría de los negocios lo hacen bajo supuestos que incluyen un estudio sobre las necesidades, el comportamiento del mercado y las oportunidades que pueden aprovechar. Pero el tiempo, la rutina y el aumento de carga de trabajo pueden llevar a una empresa a estancarse en una estrategia que pertenece a un mercado del pasado. La mejor manera de impedirlo es, sin duda, implementar sistemas de control que ayuden a tener un diagnóstico siempre oportuno del estatus actual de la empresa.
3. Falta de confianza. Se trata de empresas que comienzan con un emprendedor y crecen de tamaño con el paso de los años. Este crecimiento implica delegar e ir creando equipos responsables de diferentes áreas que, poco a poco, conformen el ecosistema empresarial y reporten al dueño.
La descentralización del poder requiere confianza por parte del líder, que debe ser capaz de focalizar sus energías en el core business de la empresa y no en toda ella.
En 320c&m somos especialistas en el análisis de riesgos y oportunidades y en la definición e implantación de acciones. Cuando detectamos áreas de mejora como las tres anteriores, no nos limitamos a realizar un informe, sino que, a partir del diagnóstico, buscamos junto con la empresa métodos dinámicos que potencien la estrategia y que fortalezcan la cultura empresarial y la cohesión entre los empleados.