EL VOLUNTARIADO CORPORATIVO, UNA DECISIÓN EMPRESARIAL QUE MERECE LA PENA TOMAR, por Gloria Codinas.
El portal Corresponsables ha reproducido en este artículo, editado con motivo del Día Internacional de los Voluntarios, las ideas de nuestra máxima responsable de Responsabilidad Social Empresarial y comunicación, Gloria Codinas, sobre una de las herramientas más potentes dentro del ámbito social de la RSE: el VOLUNTARIADO CORPORATIVO.
La gran ventaja del voluntariado corporativo es que aúna los dos grandes focos de la RSE a nivel social: por un lado, genera un compromiso por parte de los trabajadores, y también contribuye a mejorar la sociedad, ya sea a través de una colaboración que repercuta en su entorno social o en la mejora del medio ambiente.
Una empresa que favorece la implicación social de sus trabajadores construye en ellos un orgullo de pertenencia. En otras palabras, hace que esos empleados sientan que vale la pena trabajar en una empresa que realiza esfuerzos para mejorar la sociedad y cuenta con ellos para hacerlo.
El voluntariado corporativo también mejora las relaciones y dinámicas internas, ya que refuerza los vínculos interpersonales más allá del trabajo del día a día. No se percibirán a sí mismos como meras piezas de un engranaje, sino como personas que se unen para contribuir a una causa que trasciende.
A la hora de poner en marcha una iniciativa de voluntariado corporativo es muy importante definir bien el papel de la empresa y lo que se está dispuesto a comprometer para lograr ese objetivo. No se puede pedir un esfuerzo a los trabajadores si la compañía no está dispuesta a adquirir una obligación igual o mayor que el que ellos realizan, ya sea como una aportación económica, por el tiempo que se les libera de sus obligaciones o por el uso de recursos puestos al servicio de la acción. Si no se tiene esto en cuenta, la actividad puede ser contraproducente, ya que los trabajadores pueden llegar a percibir que la empresa se intenta ‘apropiar’ de una acción de los empleados.
Dado que lo más importante es que el eje de la acción sea la contribución de los trabajadores, lo adecuado es hablar de un APOYO CORPORATIVO AL VOLUNTARIADO, más que de voluntariado corporativo: así ponemos en valor que la empresa actúe como facilitador de esa acción de sus empleados, cediéndoles a ellos el protagonismo.
En este enlace encontrarás otras aportaciones al concepto recogidas en el artículo publicado por Corresponsables.